El 'DNI genético' permitirá tratar el cáncer de forma personalizada

Gabriel Hortobagyi, jefe del departamento de Oncología Médica de la Mama del Centro MD Anderson de Houston (Tejas, EE UU), afirma que identificar el perfil genético del tumor mamario, es decir, estar en posesión de su DNI genético, será el primer gran paso para seleccionar un tratamiento óptimo para cada paciente. Se trata de determinar si se puede seleccionar el régimen quimioterápico en función de los subtipos moleculares o biomarcadores.

Gabriel Hortobagyi viajó la semana pasada a Madrid para codirigir el II Encuentro Multidisciplinar del Tratamiento del Cáncer de Mama, junto con el doctor Antonio González Martín, jefe del servicio de Oncología Médica del MD Anderson España, situado en Madrid. En esta reunión se dieron cita más de 2oo expertos en mama de todo el mundo, una enfermedad, de la que en España se diagnosticaron alrededor de 18.000 nuevos casos al año.

Según el doctor Antonio González, es fundamental en esta patología la participación coordinada de oncólogos, cirujanos, patólogos, radioterapeutas, ginecólogos... También citó que el tipo de tumor mamario que expresa el oncogén HER-2, que tiene un comportamiento clínico muy agresivo y responde a terapias biológicas dirigidas a ese receptor. Así ha logrado aumentarse notablemente la supervivencia de estas pacientes.

El doctor Hortobagyi advirtió que no todas las pacientes responden a los mismos tratamientos lo que significa que el cáncer de mama no es una enfermedad, sino muchas, en virtud de las alteraciones genéticas del tumor. Las nuevas clasificaciones moleculares están permitiendo diferenciar los tratamientos para ir hacia el individual. Recientemente, según el doctor González, se están incorporando a la práctica clínica análisis de la genética del tumor mediante tests que estudian la expresión de varios genes a la vez y que se conoce como firma genética. Señaló también que este tipo de tecnología se está aplicando ya y que permite seleccionar qué enfermas se beneficiarán del tratamiento de quimioterapia después de la cirugía y cuáles no. Así se podrá evitar administrarla a quienes no les vaya a ir bien.

El cáncer de mama es el más frecuente en las mujeres occidentales y se observa que su incidencia aumenta con el nivel económico y la edad. Más de la mitad de los casos se diagnosticaron en los países desarrollados: 370.000 al año en Europa y 230.000 en en Estados Unidos.

Gracias a la detección precoz mediante mamografía cada vez son más las mujeres que superan esta enfermedad.